La cabaña está llena de barro y la leña mojada se resiste a arder. Hay silencio porque no hay nada que decir; llevamos mucho tiempo juntos y quince días solos, inevitablemente la conversación es cada vez más primaria.
Sin embargo me gusta estar sola; me gusta mirar el fuego, como una televisión en llamas en la que la imagen soy yo, como un libro en brasas que entre gemido y gemido revive un recuerdo. Es el idioma particular de Patagonia; el silencio sugestivo del fuego.
Miriam García Pascual
(fragmento) Bájame una estrella
Ed. Desnivel, Madrid, 1991